Soy el sastre del desastre, gran maestra en lo que a desorden se refiere, y una experta en hundir mi animo hasta limites insospechados. Que tan pronto un dia doy saltos como loca y al siguiente me abandono en una depresion que ahoga mis ganas mas profundas. Lo siento si ayer te dije que eras el amor de mi vida, porque hoy ya no lo eres, no se lo que quiero, o bien si lo se, pero reconozco que no lo puedo conseguir. Y entiendo que no sepas esto que me ocurre, porque en vez de echarme a llorar te escupo una sonrisa, que la soledad es ya mi mejor amiga, y cambio mis ansias de gritar por puñetazos a la almohada... Gritar, gritar estas ganas de servir, el temor a vivir, es miedo a gritar demasiado alto y que nadie me quiera escuchar, porque el cambio continuo de epidermis no desgasta las ganas de sentir..
No hay comentarios:
Publicar un comentario